El aceite esencial de eucalipto se obtiene de las hojas de la planta de eucalipto (Eucalyptus globulus) mediante un proceso de destilación al vapor. Tiene un aroma fresco, mentolado y balsámico que es muy conocido y utilizado en la aromaterapia.

Entre las propiedades del aceite esencial de eucalipto se encuentran:

Expectorante: ayuda a aflojar la mucosidad en los pulmones y a facilitar la expectoración.

Descongestionante: ayuda a descongestionar las vías respiratorias y aliviar los síntomas del resfriado, la gripe y otras afecciones respiratorias.

Antiinflamatorio: ayuda a reducir la inflamación y aliviar el dolor.

Antibacteriano: ayuda a combatir las bacterias y prevenir infecciones.

Estimulante: ayuda a mejorar la concentración y la energía.

Entre los beneficios del aceite esencial de eucalipto se encuentran:

Alivio de la congestión nasal y la tos.

Alivio de los dolores musculares y articulares.

Tratamiento de la sinusitis y otras afecciones respiratorias.

Alivio del estrés y la ansiedad.

Mejora de la circulación sanguínea.

Algunas formas de uso del aceite esencial de eucalipto son:

Inhalación: agregar algunas gotas en un recipiente con agua caliente y hacer inhalaciones para aliviar la congestión nasal y los síntomas del resfriado.

Difusión: agregar algunas gotas en un difusor de aromaterapia para disfrutar de sus propiedades relajantes y estimulantes.

Masaje: mezclar algunas gotas con un aceite portador y aplicar en la piel para aliviar el dolor muscular y la rigidez.

Uso tópico: aplicar directamente en la piel para tratar infecciones y ayudar a la cicatrización de heridas.

Algunas contraindicaciones del aceite esencial de eucalipto son:

No se recomienda su uso en niños menores de 6 años.

No se debe utilizar en personas con hipertensión arterial.